Luka Modric tiene preparadas las maletas y reservado un billete en
un avión privado para desembarcar en Madrid. Puede ser en las próximas
horas, algo inminente y que únicamente se está demorado por el retraso
que sufren las negociaciones que tiene abiertas el Tottenham para
fichar a su sustituto. Su técnico, André Villas-Boas, sigue dando
prioridad al centrocampista portugués del Oporto, Moutinho, aunque la
otra opción es M’Vila.
Pero entre el Tottenham y el Real Madrid todo está cerrado a la
falta de firmar los documentos. El jugador no puede ocultar su
impaciencia por recibir el O.K. de su representante. Vive pegado al
teléfono y es su padre el que le tiene informado en cada momento de
cómo están las negociaciones.
Luka Modric está ayudando y colaborando mucho para facilitar su
llegada al Real Madrid. Desde el Tottenham le llegaron a ofrecer 5
millones de euros anuales de sueldo, una cantidad que casi doblaba su
actual salario en los Spurs, en un intento de convencerle de que
quedarse en Londres era la mejor opción. Luego llegó otra oferta
mareante desde Francia. El París Saint-Germain puso sobre la mesa 40
millones de euros y le ofreció 5,3 al año al jugador, pero Modric
también rehusó la propuesta gala.
Su ficha en la casa blanca no llegará a los 5 millones de euros,
pero Modric lo da por bueno porque su sueño es vestir la elástica
blanca.
Tomado de Marca