Un duro testarazo de Cristiano Ronaldo fue suficiente para que
Portugal se convirtiera en la primera semifinalista de la Eurocopa de
Ucrania y Polonia. El atacante portugués remató un centro desde la
derecha y permitió a los suyos esperar al ganador del encuentro entre
España y Francia.
Sólo el siete luso dio la cara en una primera mitad que tuvo unos
minutos para cada equipo. Ninguno de los dos consiguió dar más de cinco
pases consecutivos pero la calidad del madridista hizo que los checos
se llevaran el primer susto del partido con un remate al palo poco
antes del descanso. Los de Bilek, buscaron, sin éxito, la velocidad de
Gebre Selassie y los centros del lateral, pero el cuero se paseó sin
pena ni gloria por el área de Rui Patricio.
El segundo acto comenzó con un nuevo disparo al palo de Cristiano
Ronaldo. Los lusos trataron de tener el balón en su poder y se
crecieron frente a un rival que perdió la batalla en el centro del
campo.
A pesar del control del balón, los hombres de Paulo Bento crearon
todo el peligro jugando con verticalidad gracias a la velocidad de un
Cristiano que dejó la banda en numerosas ocasiones para superar por el
centro del ataque a la zaga rival. Con Helder Postiga lesionado y Hugo
Almeida, que sólo apareció para que le anularan un gol por fuera de
fuero, la estrella del Madrid tuvo que echarse el equipo a la espalda.
Cuando parecía que los portugueses eran incapaces de superar la
defensa de unos checos que se conformaban con el cero a cero para
buscar la prórroga y posiblemente los penaltis volvió a aparecer
Cristiano. El atacante madridista se puso el traje de delantero centro
y cabeceó al fondo de la red un centro desde la derecha de Moutinho.
Gebre Selassie se confió, mostró demasiada pasividad para despejar el
cuero y vio como Cristiano le adelantaba como un avión para estrenar el
marcador.
Ni con el tanto en contra reaccionó el conjunto checo. La medular
estaba huérfana sin Rosicky y sólo Pilar y Jiracek pudieron dar una
mínima esperanza a sus aficionados. Los últimos minutos fueron más
cómodos de lo esperado para una Portugal que se ha hecho hueco entre
las mejores selecciones del continente gracias a su estrella, quien ha
dado un paso de gigante en la lucha por el Balón de Oro.
Tomado de Marca